Samo el aprendizDespués de su primer álbum como solista, Inevitable, Me quito el sombrero refleja la impecabilidad con la que Samo se desenvuelve en los escenarios y con la que puede interpretar una canción que no es de su autoría. «Con este concierto, deseo que la gente vea que lo que más amo en este mundo es cantarles. Les pido me abran sus oídos y ojos, que se conecten con la pasión con la que interpreto cada canción de esos grandes cantautores que muchos admiramos y a quienes les que tengo un profundo respeto».

Me quito el sombrero es una grabación completamente en vivo, en la que Samo hace homenaje a específicos autores o intérpretes que, con sus canciones, marcaron diferentes etapas de su vida. Un material que, sin duda, logrará sacar una lágrima a quien lo escuche no sólo por su bella voz y maravillosa forma de cantar, sino por los arreglos musicales actuales y el recuerdo al que los temas evocan. El cantautor se aventuró en el reto de elegir, entre cientos de canciones, aquellas que conectaran con sus sentimientos y su alma, formando una comunión entre sus experiencias y las del público. «La selección de los temas para este proyecto fue difícil, porque hay muchos autores, cantantes y canciones que admiro. Pensé que cada una de las canciones que interpretaría debía forzosamente conectar conmigo y con mis sentimientos. Me sentaba todos los días a escuchar los temas de muchos de los artistas que admiro y si la canción me hacía sentir una emoción profunda y me llevaba a un recuerdo específico de mi vida, la elegía».

El primer sencillo de esta gran producción es: El Aprendiz, a dueto con el cantautor boricua Pedro Capó. Escrita por Alejandro Sanz, Samo describe el mensaje de esta canción de la siguiente manera: «No todo en las relaciones de amor es bello, hay relaciones que continúan y que los unen sentimientos de coraje, frustración y mentira. Esta espectacular composición de Sanz nos motivó a producir musicalmente un sonido con fuerza y la interpretación apasionada de Pedro Capó da muestra clara de la intensidad de esta producción». Sumada a la voz melódica de Samo y el diseño de los coros con cinco voces en vivo el resultado es una canción que llega a los oídos para recordarnos cuánto podemos amar y odiar al mismo tiempo.

La dirección y realización musical estuvo a cargo del productor español Rafa Vergara, quien ya había colaborado con Samo en su álbum Inevitable y la dirección de grabación de imagen estuvo a cargo de Ricardo Calderón. Este álbum en vivo se grabó con 8 cámaras y una grúa. El diseño del escenario del Teatro Juárez y la iluminación son elegantes, pero a la vez sutiles, con un telón de más de 15 metros de largo que refleja la sublime iluminación que crea diversos ambientes de acuerdo al sentimiento de cada canción.

Me quito el sombrero es un símbolo de respeto al talento de estas grandes figuras, la materialización de un sentimiento hacia aquellos que, sin saberlo, fueron un referente y guiaron a Samo en su carrera, una muestra palpable de admiración hacia su manera de interpretar, su pasión por la música y su incansable y continuo proceso creativo para el público; razones suficientes para que a travÉs de su canto, Samo les ovacione.