«Fruta Prohibida» de Melissa Láhur, representa para la artista payanesa, la sensualidad femenina, la verbalización del deseo y la fantasía de lo prohibido. Con sonidos urban kizz, fusionados con tintes electrónicos y el timbre de las flautas andinas y las semillas (instrumentos folclóricos de nuestro país) transportan a los oyentes a un lugar diferente al cotidiano terrenal.

Esta canción llega luego del tema “Otra Vida”, con el que conquistó miles de corazones, no sólo por su talento y grandiosa voz, sino gracias a un video muy emotivo y original.

Con “Fruta Prohibida”, Melissa ha querido poner sobre la mesa una historia de liberación. Esta canción, que habla del deseo que tienen dos personas de estar juntas y que internamente algo les impide que den rienda suelta a sus instintos, invita a amar sin prototipos, a vivir sin máscaras, ni tapujos, siempre respetando y amando a los demás. A permitirse sentir y disfrutar sin importar lo que la sociedad imponga, a dejar los prejuicios y a amar a todos por igual sin importar su raza, condición sexual, nacionalidad, género o condición social.

En el videoclip Melissa Láhur representa a una Diosa de la dualidad, que, junto a su séquito, observa que en la tierra hay una cena de mascaradas de alto estatus, en la que se encuentran dos hombres atrapados entre el deseo de estar juntos y el impedimento de una sociedad “correcta” para cumplir con su deseo. Esta Diosa se viste de mesera para infiltrarse en dicha cena y hace que los dos hombres coman la “Fruta Prohibida”.

Cuando lo hacen el mundo entero desaparece, se despojan de sus ropas y se liberan de sus máscaras para vivir profundamente lo que tanto deseaban, en una espectacular coreografía de danza contemporánea de dos bailarines y actores profesionales colombianos. Al final el paraíso conquista a la tierra y hace que por un encanto mágico cada uno de los asistentes a la cena se despoje de su máscara.