Su éxito es el resultado del esfuerzo,
Julián Espinel Oviedo, es un joven santandereano de tan solo 22 años, quien a punta de tesón y esfuerzo ha logrado escalar en el mundo de la música: “Hace cuatro años conforme con un amigo un dúo de reggaetón, estuvimos juntos un par de años desde el 2008 al 2010 e hicimos un buen nombre en nuestra ciudad natal Bucaramanga, pero mi ímpetu y ganas no fueron suficientes y debí disolverlo pues él no tenía los mismos sueños que yo, como lo son llegar lejos y trascender en la música haciendo un trabajo con dedicación y disciplina. Yo vivo para la música, trabajo de noche y de día junto con mi hermana y mi cuñado, tenemos una empresa de sonido para eventos y con eso nos hemos levantado y de allí ellos me apoyan para lograr este sueño que hoy se llama “El tenor de la calle”. Proyecto con el cual Ju-Lee, logró este año 2011 ubicar su primer sencillo “Fin de semana”, durante doce semanas en primer lugar de la emisora “Tropicana Stereo” de Bucaramanga. Hoy, ya en Bogotá, comienza a sonar fuertemente en la emisora Oxigeno y Tropicana en la capital lo cataloga 
como la revelación para el 2012 en este género urbano.
El Juli, como lo llaman sus amigos, es un muchacho impresionantemente serio para su edad. El titulo de El Tenor de la calle, nace porque los conocedores de la música afirman que Julián tiene un tono de voz maravilloso, con excelente color y muy bien cultivada. Y no es para menos, pues desde los 10 años tenía claro que sería cantante, en su niñez participaba en cuanta presentación y musical se presentaba: “Es un lindo y maravilloso cuento de niños que estoy logrando de la mano de mi familia y de Dios, porque sé que sin él no hay nada. Soy una persona feliz, mi vida es la música y me cuido muchísimo, ya la época de la rumba, el trago y las mujeres para mí quedo atrás. No permito que nada ni nadie me distraiga, porque creo que es lo primordial para lograrlo como debe ser. El público merece respeto y me debo a ellos así que por eso un día decidí decir no más”. Afirma con emoción.
Parece increíble que el adolescente que en el 2005 con tan sólo 15 años vivió la ruptura total de su familia, cuando su padre perdió todo y se separó de su madre, la familia se desintegro. Julián se fue a vivir con su abuelita y hasta el 2008 su hermana Yoanglee, ya casada y con un hijo, le pidió que se fuera a vivir con ella. Tomaron ya juntos la decisión de emprender la lucha como familia, meses después trajeron a su mamá Maribel y conformaron “Bocadillo Records”, dedicada hoy por hoy a manejo de artistas y producción de eventos. De esta empresa la familia ya pudo volver a tener vivienda propia, automóvil y un proyecto de vida “JU-LEE”, el sueño de una familia que sabe y ama el mundo del entretenimiento.