El mundo y la familia salsera lloran por la partida de Cheo Feliciano, un gran ser humano, inigualable caballero y un artista encantador que deja una huella imborrable en la industria musical.

Cheo Feliciano, esposo de Coco Feliciano y padre de cuatro hijos, falleció, la madrugada del jueves 17 de Abril, en un accidente de tránsito cuando regresaba a su casa en la localidad de Cupey (a las afueras de San Juan) en un Jaguar que se estrelló contra un poste de cemento, lo que causó su muerte al instante.

La estrella de la música deja un inigualable legado y una tristeza en el mundo. El gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, declaró tres días de duelo.

«Muy lamentable la muerte de Cheo Feliciano. Que en paz descanse. Se nos fue pero nos dejó un legado musical impecable. Que Dios lo tenga en su gloria», dejó escrito Sergio George en Twitter.

Nacido en la ciudad de Ponce el 3 de julio de 1935, fue un grandioso compositor y cantante puertorriqueño de salsa y bolero, cuyas famosas piezas como «Anacaona», «A las seis», «Cómo ríen», «El Pito», «El Ratón», «Salí Porque Salí», «Juan Albañil» y «Amada Mía», entre otras, lo posicionaron como uno de los grandes íconos latinoamericanos de la música desde la dÉcada de 1950.

En Nueva York (1952) inició como percusionista para diversas orquestas, hasta que en 1957 encuentra su primera oportunidad como cantante en la orquesta de Joe Cuba. Más tarde, pasa a ser el vocalista de la orquesta de Eddie Palmieri (1967-1969), hasta que los problemas de salud lo obligan a retirarse y retoma la actividad artística en 1972, año en que publicó su primer álbum como solista, «Cheo». En la dÉcada de los setenta, grabó para Fania Records y en 1982 creó su propia discográfica, Coche Records. Su último álbum, «En la intimidad», fue publicado en 2002.