La talentosa Sara Jaramillo presenta una perspectiva muy femenina, al sentir que el amor es para siempre con su sencillo «Contigo».

«Contigo» fue compuesta por Sara Jaramillo, Andrés Restrepo “Rolo” (Icon Music), que también fue el productor, y Andrés Uribe “Ily Wonder”; fue grabado en el estudio de Mosty, en la Ceja, Antioquia.

“Venía de presentar una canción como ‘Muévete’, que traía un mensaje social y rechazaba el maltrato a la mujer. Sin embargo, como cantautora no me puedo alejar del amor y tenía claro que quería hacer una canción para dedicarle a esa persona que te hace feliz y con la que quieres pasar el resto de tu vida” afirma Jaramillo.

Con un mensaje claro, Sara, y quienes participaron en esta canción, quisieron destacar el amor en tiempos de pandemia, reafirmando que aunque el futuro sea incierto el amor puede sobrevivir cualquier adversidad.

«Contigo» se define como un reggaeton romántico, con un ritmo perfecto para bailar y disfrutar en cualquier parte. Es una canción basada en sintetizadores acompañados por guitarra y bajo. Tiene “dembows” que son los encargados de poner a bailar a la gente.

Grabar en medio del aislamiento fue todo un reto para Sara y su equipo, sin embargo no fue impedimento para realizar un trabajo de calidad. La cantante se negaba a quedarse quieta y parar el proceso en el que venía trabajando, aprovechó los días en los que le aplicaba el pico y cédula para asistir al estudio de grabación, con todas las medidas de precaución, y así poder seguir creando música para todo su público, quienes son su principal motivación.

Durante un sueño Sara se convierte en un personaje de comic junto con su pareja para demostrar que el amor es más fuerte que todo. En el video, la intérprete aparece como una heroína fuerte y decidida que se recarga de vida al sentirse respaldada de su compañero, con quien quiere vivir a su lado hasta viejitos.

El videoclip fue realizado en agosto de 2020 bajo la dirección de Manuela Villada en Medellín, mientras tanto el diseño creativo de las ilustraciones estuvo a cargo de Jeisson Malagón en la ciudad de Bogotá.